"Vámonos, que hace buena noche". Se escuchaba desde el entorno de la torre de sonido a David Bisbal mientras unas filas más adelante en la platea, las y los fans más incondicionales del almeriense estaban preparados para corear y vibrar con uno de los referentes de la música latina. En la "intro", la imagen del andaluz emergía en pleno techo del escenario. Bisbal golpeaba la pantalla mientras sus legión de seguidores exclamaban ante un inicio de espectáculo que era ya cuestión de segundos. Ese Bisbal virtual continuaba golpeando otras pantallas, hasta que se resquebrajaba para, ahora sí, aparecer en carne y hueso ante las miles de personas que esta noche de verano han abarrotado el Auditorio de Castrelos.
Energía, ritmo y pasión. Posiblemente, los tres ingredientes que han catapultado a David Bisbal en dos décadas a ser un talento emergente en un "talent show" televisivo en España ser un ídolo ya no solo en España, sino también en todo Latinoamérica. De aquel joven de rizos inquieto de 2001 han pasado más de 20 años. Ese espíritu inquieto, desbordante, prosigue. Ha alcanzado la madurez con canciones que ya se han convertido en himnos para varias generaciones. Sin embargo, el almeriense quiso empezar su velada en Vigo con "Ajedrez", uno de sus éxitos más recientes.
El público estaba entregado. La conexión era perfecta desde el primer acorde, desde el primer verso interpretado por el andaluz. "Quién me iba a decir" fue la segunda canción en incendiar una velada en la que Bisbal bailaba y Castrelos vibraba. Posteriormente, el almeriense tiró de ironía para dirigirse a su legión de seguidoras y seguidores, algunos procedentes de otros puntos del país como Asturias, donde muchas de ellas estaban en la primera fila de la platea, la única zona de pago de Castrelos y en la que las 5.000 localidades que se pusieron a la venta se agotaron en apenas unos minutos. "¡¿Cómo están los máquinas?!", preguntaba el andaluz, en alusión a ese vídeo que se viralizó hace meses.
El recital continuó regalando un recorrido por esos grandes éxitos que han forjado la carrera de David Bisbal y que se ha convertido en la banda sonora del siglo XXI. "Torre de Babel", "Lloraré las penas", "Camina y ven" y "Oye el boom" fueron los siguientes temas en los que el andaluz siguió demostrando su grandeza encima del escenario de Castrelos, un lugar que ya conquistó en 2019 bajo la intensa lluvia y que esta noche, casi cuatro años después, consumó esa gran velada ya sin la adversidad de los elementos meteorológicos.
David Bisbal ofreció un recital que se prolongaría hasta casi medianoche, un concierto donde el público se convirtió en el mejor coro de una actuación que sirvió para rememorar los más de 20 años de carrera musical del almeriense, que realizó dos "medley" para combinar sus baladas y sus colaboraciones con otros artistas destacados como Sebastian Yatra, Aitana, Luis Fonsi o Greeicy. Este último recurso era el elegido para firmar su primera despedida de la noche, la previa al bis que pondría el colofón a una noche inolvidable.
El artista andaluz se vaciaba encima del escenario acompañado por la bandera gallega. En su primer adiós, presentaba a toda su banda, lanzando un guiño especial a su pianista, el vigués Gabriel Peso, "que hoy juega en casa". Tras esa breve despedida, ese tradicional espacio que todo cantante hace para que se coree el "otra, otra", David Bisbal irrumpió para poner el petardazo final a su espectáculo en Castrelos. La reaparición no estuvo exenta de retranca, con una camiseta de color oscuro con las letras de "¿Cómo están los máquinas?", la ultima indumentaria que llenó de sudor el andaluz, que eligió tres de sus éxitos más "top" para desatar la locura ante el publico. "Corazón latino", ese tema que aspiró a representar a España en Eurovisión; "Bulería" y "Ave María", el epílogo perfecto que arrancó con la imagen del videoclip de aquel joven David Bisbal de 2002.
No habían llegado todavía las 00:00 horas. David Bisbal se despedía tras casi dos horas de concierto. "Disfruten de sus fiestas, de Galicia", aconsejaba el almeriense antes de lanzar un último mensaje a sus fans. "Me van a tener siempre que quieran", expresó el almeriense, que ya se ha convertido en todo un clásico en el Auditorio de Castrelos.
El siguiente artista en subirse al escenario del Auditorio de Castrelos será Pablo López, que actuará en el parque vigués el próximo 24 de julio a las 22:00 horas. Las entradas para la zona de pago se pondrán a la venta este martes. El sistema será el mismo que el empleado para David Bisbal. Es decir, 2.500 se despacharán en el turno de mañana -de 09:00 a 13:00 horas- y las 2.500 restantes en el turno de tarde -de 16:30 a 20:00 horas-. La mitad de los tickets se podrán adquirir en la web de Vigo en Festas (haz clic aquí) y la otra mitad estarán disponibles en la taquilla del Auditorio Municipal situado en Praza do Rei.
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